Antes que nada, te proponemos reflexionar sobre esta imagen:
Esto mismo ocurre con las células. Cuando nuestro ecosistema corporal interno se “ensucia” más rápido que nuestra capacidad depurativa natural, las células de todo el cuerpo comienzan a recibir menos nutrientes y oxígeno. Esto genera dos consecuencias:
- Por un lado, el cuerpo saca de la circulación sanguínea esa toxicidad ya que en sangre correría peligro nuestra vida. Y la acumula donde puede, por ejemplo formando quistes, nódulos, placas de ateroma en arterias, adiposidad subcutánea o abdominal, cálculos hepáticos, biliares o renales, etc.
- Por otro lado, al no recibir los nutrientes necesarios, se ve perjudicada la capacidad funcional del órgano (al no tener la nafta adecuada, el auto no funciona correctamente). Esto con el tiempo se traduce en síntoma o diagnóstico de enfermedad crónica: hipo/hipertiroidismo, D2, enf. renal, anemia, problemas en la piel, hígado graso, fatiga persistente, fibromialgia, migrañas, intestino irritable y permeable, endometriosis, infertilidad, etc….
Las enfermedades tienen un origen múltiple, no hay una única razón por la cual nos sentimos mal o nos enfermamos. Según una mirada más integrativa y menos parcializadora, el síntoma aparece por una confluencia de situaciones que tienen que ver con el linaje ancestral, el plano emocional, mental y espiritual. Estas situaciones, sumadas a los hábitos de la vida moderna, se manifiestan en el cuerpo físico generando un terreno hostil para las células y los sistemas biológicos, que se ven obstaculizadas para poder realizar sus funciones.
El origen de las enfermedades es absolutamente misterioso y solo sabemos una partecita muy pequeña. Sin embargo, hemos podido constatar una y otra vez, que limpiando el terreno corporal, aparece un estado de mayor armonía en el plano físico que contribuye en gran medida con la posibilidad de restituir la salud, remitir síntomas, resolver enfermedades, y poder así, disminuir paulatinamente la medicación crónica. Abordar las enfermedades desde sus distintos ángulos permite hacer un tratamiento más integral, potenciando el proceso y propiciando la transformación personal.
¿QUÉ SIGNIFICA DESPARASITAR Y LIMPIAR EL CUERPO?
Así como limpiamos el hogar para que sea un espacio agradable donde poder vivir en armonía; es necesario limpiar el terreno corporal interno para que las células (pececitos) puedan recibir nutrientes y funcionar adecuadamente.
Depurar significa limpiar el organismo, sacar la basura histórica acumulada. La tarea consiste en crear las condiciones necesarias en el ambiente corporal para que el cuerpo deje de activar mecanismos compensatorios de supervivencia, y se autocure.
¿POR QUÉ LIMPIAR EL CUERPO SI TIENE ÓRGANOS QUE SE OCUPAN DE ESO?
Porque la carga tóxica sostenida en el tiempo (proveniente fundamentalmente de los hábitos y condiciones de la vida moderna), suele sobrepasar la capacidad depurativa natural de nuestro cuerpo en la actualidad. Órganos filtro como hígado, riñones, colon, piel, respiratorio, tienen actividad depurativa permanente, sin embargo llega un momento en que estos filtros se tapan o no alcanzan a depurar todo la toxemia presente en el organismo.
¿CÓMO SE HACE?
Como decía Hipócrates: “Todas las enfermedades se curan mediante alguna evacuación”. Los drenajes siempre impulsan la tendencia al equilibrio y resultan útiles en cualquier circunstancia, por más grave que sea. Además, solo basta mirar qué hacen los animales cuando se sienten mal: ayuno, purgas y descanso.
Hay muchísimas herramientas naturales orientadas a propiciar un terreno oxigenado, levemente alcalino, con equilibrio microbiano; y que contribuyen a la salida de toxinas. Las que solemos utilizar en VIVIR TU LUZ, son estas:
- Jugo de clorofila
- Alimentación desinflamatoria consciente
- Plantas medicinales: hierbas y tinturas madres
- Desparasitantes naturales
- Agua de mar
- Hidroterapia colónica – conocer más
- Limpieza hepática profunda – conocer más
- Elementos de higiene y belleza naturales, no sintéticos (para dejar de inhibir los mecanismos depurativos naturales del cuerpo)
- Sol, aire y tierra. Contacto con la naturaleza (para potenciar la depuración y el equilibrio electromagnético).
ALGUNOS DE LOS CAMBIOS MÁS HABITUALES que suceden en las personas que experimentan un proceso depurativo, independientemente de la patología específica:
- Tener más energía para las actividades del día a día.
- Desinflamar el abdomen y el cuerpo en general.
- Mejorar el proceso digestivo, el ritmo evacuatorio y remitir los síntomas gastrointestinales.
- Disminuir y eliminar los dolores articulares y musculares.
- Sentir más tranquilidad y paz interior
- Mayor claridad para pensar y tomar decisiones
- Mejorar la circulación de la sangre
- Aliviar dolores menstruales y ordenar las alteraciones del ciclo.
Las experiencias de reducción de medicaciones y desmedicalización, son cada vez más. Te invitamos a experimentar un proceso depurativo del cuerpo para poder vivir en primera persona los incontables beneficios de desintoxicar el organismo. No es necesario “blanco Ala”, pero si estás en un camino de búsqueda de sentirte mejor sin depender de la medicación para siempre, en nuestra experiencia depurar el cuerpo físico es un paso más que relevante.
Si querés hacerlo y no sabés cómo o no te animás a hacerlo por tu cuenta, en el Acompañamiento grupal nuestro objetivo es que puedas ser protagonista de tu proceso de desintoxicación, guiándote a que puedas implementar cada una de las herramientas depurativas semana a semana. ¡Te esperamos!
Dra. Viviana Visús y Lic. Lucía Caminetsky
